Griselda Ramírez Foto: Luis Enrique Granados/ redes
En el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas del Mundo, expertos de la ONU aseguraron que «la preservación de las comunidades, valores y formas de vida de los pueblos indígenas depende de que las mujeres y niñas indígenas recuperen sus roles como lideresas dentro de sus comunidades».
El grupo de expertos y expertas de la ONU, está convocando a los Estados a tomar medidas afirmativas para garantizar su plena participación pública y política.
Su declaración conjunta indica que:
“Las mujeres indígenas son agentes activas de cambio en la sociedad y campeonas de la sostenibilidad. Las mujeres indígenas son guardianas de una acumulación colectiva de conocimientos científicos y habilidades técnicas relacionadas con la alimentación y la agricultura, la salud y la medicina, la gestión de los recursos naturales, el cambio climático, el idioma, las artes, las artesanías y las prácticas espirituales. Este conocimiento científico tiene un papel clave que desempeñar para salvaguardar los ecosistemas y garantizar la justicia y la equidad ambientales. La comprensión profunda de las mujeres indígenas sobre la botánica y las especies animales es una herramienta poderosa para mitigar los impactos catastróficos del cambio climático».
También, afirman que tanto el desarrollo como la preservación y transmisión de su conocimiento está indisolublemente ligado a la forma en que las mujeres indígenas utilizan su territorio, tierras y recursos.
Por ser mujeres e indígenas, se ven afectadas de manera desproporcionada por la pérdida de tierras, territorios y recursos ocasionada por el cambio climático, los conflictos, el desarrollo y la creación de áreas protegidas. Además, las formas múltiples e interrelacionadas de discriminación, así como la violencia en su contra, crean barreras para el desarrollo de las mujeres y el uso de su conocimiento científico, incluido el acceso a tierras y recursos, oportunidades educativas y laborales, atención sanitaria y participación política en la gobernanza nacional y local.
El texto profundiza que las mujeres indígenas se ven afectadas de manera desmesurada por los efectos ecológicos, económicos y espirituales de las industrias extractivas en sus tierras. Su conocimiento se desvaloriza cuando los recursos naturales que administran son explotados sin su consentimiento libre, previo e informado. La pérdida de acceso y propiedad de las tierras las priva de sus funciones y ocupaciones comunitarias, y amenaza su capacidad para mantener y transmitir sus conocimientos científicos y técnicos.
Las personas expertas de Naciones Unidas, menciona que históricamente las mujeres indígenas han sido lideresas en sus comunidades, roles que las generaciones recientes no deben perder.
Los Estados deben asegurar la protección legal efectiva de los derechos de las mujeres indígenas a las tierras, territorios y recursos, y promover la participación significativa de las mujeres indígenas en la gestión y regulación de sus tierras y recursos. Esto debe incluir su participación en procesos de consulta sobre asuntos administrativos y legislativos, así como proyectos que puedan impactar tierras, territorios y recursos indígenas, con el fin de obtener su consentimiento libre, previo e informado.
«Los Estados deben tomar medidas afirmativas para garantizar la participación pública y política plena e igualitaria de las mujeres indígenas, incluso mediante el establecimiento y el fortalecimiento de instituciones para las mujeres indígenas en roles de liderazgo”, culmina el texto.