“Somos los pueblos indígenas quienes guardamos y procuramos la diversidad lingüística, cultural, espiritual y el 80% de la biodiversidad restante del planeta. Somos las alternativas vivas ante la crisis climática”.

Tlapa, Guerrero. Integrantes de pueblos Kiliwa, Cucapá, Nahua, Acolhua, Tzeltal, Tzotzil, Ñuu Savi, Hñatho, Amuzga, P’urépecha, Ayuuk, Afrodescendiente, Zapoteca, Popoluca, Maya Peninsular, Maya, K’iche’, Wayuu, Zoque, se nombraron y germinaron como #FuturosIndígenas, una red que busca alzar la voz ante la pronunciada crisis climática que se vive.

Tras leer en redes “No es sequía, es saqueo”, con la emergencia, también hay una urgencia por denunciar y enunciar las causas reales de esta catástrofe ambiental, que hoy amenaza al planeta entero. La catástrofe es síntoma de una enfermedad que llegó hace más de 500 años a nuestros territorios, señala la red.

Al considerar que la crisis climática es consecuencia de los sistemas de desigualdad estructural que hoy gobiernan en el mundo; representantes de pueblos indígenas, en mayoría mujeres, comunicadoras y defensoras del territorio sumaron ideas, corazones y esfuerzos para fortalecer sus resistencias desde la comunicación comunitaria; con una perspectiva crítica, con metodología y herramientas de análisis del discurso, mapeo de redes, acción narrativa y hackeo cultural.

Estudios recientes demuestran que el 92% de los excedentes de emisiones de gases de efecto invernadero por persona están concentrados en los países ricos y en su modelo insostenible de consumo.

Se necesitan 5 planetas tierra si la humanidad aspira al consumismo de un estadounidense promedio, pero si la aspiración de vida fuera la de una persona indígena, estaríamos dentro de los límites planetarios. ¿Qué nos dice eso sobre el futuro?

La cura de la tierra la nombramos defensa de la vida y del territorio.

En ese sentido, la red informó que se abocará a visibilizar gestión comunitaria del agua y la energía, autonomías territoriales, gobiernos indígenas, rescate de la diversidad lingüística, defensa de nuestra identidad, búsqueda de memoria y justicia, migrar sin fronteras, sembrar la milpa, volver a los tiempos cíclicos, honrar los saberes de las abuelas y abuelos, defender el futuro de las generaciones por venir, practicar otras formas de espiritualidad, organizar la fiesta en el barrio y la comunidad. Para seguir rexistiendo.

La red nace a partir del Laboratorio “Hackear la crisis climática: el futuro es indígena”, un proceso de formación en narrativas de resistencia realizado con el apoyo del British Council México, Ambulante y Hackeo Cultural.