Zacatecas

Desde hace más de 7 años el Movimiento en Defensa del Territorio y del Río Atenco, Movimiento integrado por ejidos y comunidades de los municipios de Sombrerete y Jiménez del Teul, han estado defendiendo el río Atenco en contra del proyecto de la presa Milpillas porque atenta contra sus formas de vida, señalan las organizaciones. En conjunto con organizaciones hermanas, académicos y académicas, han demostrado que el proyecto de construcción de la presa Milpillas es inviable y no resolverá la crisis hídrica del estado de Zacatecas, denunciaron.

Durante el pasado periodo electoral 2024, candidatas y candidatos a la gobernatura del estado, a las diputaciones, senadurías y presidencias municipales de la región, tomaron el asunto de la presa Milpillas para hacer campaña electoral y pronunciarse a favor o en contra de dicho proyecto. Quienes lo hicieron a favor del proyecto, mostraron que la participación y decisión ciudadana no es su interés. Durante sus campañas les exigimos que respeten nuestra postura y, en caso de ganar, no se vuelvan promoventes y no impongan un proyecto que no queremos y que además es inviable. A quienes se manifestaron a favor de la decisión de los pueblos, en contra del proyecto de la presa Milpillas, les hacen un atento llamado para iniciar su compromiso manifiesto de no respaldar el proyecto en nuestros ejidos y comunidades. La petición es respetuosa pero firme, y les exigen cumplir con su palabra.

Ahora que terminaron las elecciones, exhortan a Daniel Cisneros Esparza, presidente municipal electo de Jiménez del Teul y a Ramiro Hinojosa Aguayo, presidente municipal electo de Sombrerete a cumplir con el compromiso que hicieron con el pueblo y no apoyen el Proyecto Hídrico Milpillas, ni de la presa San Andrés (o cómo le nombren). Además, les solicitan cumplir su compromiso y empezar a convocarnos para iniciar el proceso para que, en cuanto tomen el cargo, les llamen como población a la asamblea de cabildo abierta en la cual establezcan la Declaratoria de Municipios Libres de Megaproyectos.

Durante estos años demostraron que no cederán sus derechos a placeres desarrollistas, demostramos también que seguiremos luchando por acabar con la impunidad de quienes violentan la justicia con tal de beneficiarse de un proyecto que no tiene sustento social, ambiental y técnico y que, en consecuencia, perjudicaría a toda la región. Su lucha ha sido transexenal y van a seguir defendiendo su río, su territorio.

«Desde nuestros ejidos, ranchos y comunidades de Jiménez del Teul y Sombrerete en Zacatecas, enviamos un saludo combativo a todos los pueblos que como nosotras y nosotros luchan por la vida día con día».

¡No a la presa Milpillas, sí a la vida!